George Wright prófugo estadounidenses en Portugal.-a
Soledad Garcia Nannig; Maria Veronica Rossi Valenzuela; Francia Vera Valdes
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Los detalles sobre la doble vida de George Wright parecen sacados más bien de una trama de Hollywood que de los expedientes del FBI.
Ana Karina González Huenchuñir
Sus vivencias no dejan de levantar curiosidad desde que el pasado martes las autoridades detuvieran en Portugal a uno de los fugitivos más buscados desde la década de los 70, quien a los dos años de huir de una cárcel de Nueva Jersey secuestró un avión vestido de cura con una pistola escondida en la Biblia.
Si el día de su arresto se dio a conocer que el fugitivo había trabajado como modelo y se había unido al Ejército Negro de Liberación, este jueves sale a la luz que después de huir de Estados Unidos vivió como hombre libre en el continente africano.
Wright, quien durante 41 años estuvo en paradero desconocido, residió en los años ochenta en Guinea-Bissau bajo su nombre real e incluso llegó a relacionarse con los funcionarios de la Embajada estadounidense en el país.
El ex embajador de EEUU John Blacken asegura que se sorprendió al escuchar la noticia del arresto de Wright, de 68 años, porque nadie de su entorno sabía que el afroamericano era en realidad un prófugo, condenado por el asesinato en 1962 del héroe de guerra Walter Patterson en una gasolinera en Farmingdale.
"Todo esto fue una gran sorpresa, Dios mío, el asesinato y todo lo demás", dijo Blacken en una entrevista telefónica con Associated Press desde Bissau. "Nadie se imaginaba que era un asesino, por supuesto que no lo conocía tan bien. Parecía una persona normal y nada radical".
En agosto de 1970, Wright y otros dos presos escaparon de la cárcel de Leesburg, en Nueva Jersey, robaron un coche y se dirigieron a Atlantic City.
Secuestro de avión
Secuestro de avión
Tan solo dos años más tarde secuestró, junto a compañeros del Ejército Negro de Liberación, un vuelo de Delta Airlines con ruta Detroit-Miami, y tras intercambiar los 86 pasajeros por un millón de dólares volaron hacia Argelia, donde las autoridades del país retornaron el avión a Estados Unidos pero aceptaron dar asilo a los secuestradores.
Vida en Portugal
La esposa del prófugo estadounidense George Wright, detenido recientemente en Portugal, dijo que su esposo le dijo que había escapado de una cárcel en Estados Unidos, pero que nunca le reveló que había sido declarado culpable de asesinato ni acusado de un secuestro aéreo.
Maria do Rosario Valente dijo que se sorprendió enterarse del pasado de su esposo luego que éste fue detenido en Portugal la semana pasada tras 41 años a la fuga. Dijo que ella pensaba que el relato de su esposo de que había escapado de prisión “era sólo una fanfarronada”.
“Ahora me he enterado del resto”, le dijo Valente a la televisora portuguesa TVI en una entrevista transmitida el domingo.
Wright, que vivía bajo el nombre de José Luís Jorge dos Santos, no tenía ocupación conocida, pero supuestamente en un momento poseía un restaurante de pollo a la barbacoa , vendió artículos en un puesto en una popular playa turística, trabajó como guardia en un el bar local, y, al igual que Melvin McNair, entrenó a jóvenes en el baloncesto estadounidense. Se casó con un traductor portugués-inglés que era 13 años más joven y, juntos, la pareja tuvo dos hijos. Sus vecinos sabían que su primer nombre era George, pero no conocían su historia, suponiendo que fuera africano, no americano.
Portugal rechazo su extradición, porque Wright tiene la nacionalidad portuguesa y por prescripción de la pena.
Vida en Portugal
La esposa del prófugo estadounidense George Wright, detenido recientemente en Portugal, dijo que su esposo le dijo que había escapado de una cárcel en Estados Unidos, pero que nunca le reveló que había sido declarado culpable de asesinato ni acusado de un secuestro aéreo.
Maria do Rosario Valente dijo que se sorprendió enterarse del pasado de su esposo luego que éste fue detenido en Portugal la semana pasada tras 41 años a la fuga. Dijo que ella pensaba que el relato de su esposo de que había escapado de prisión “era sólo una fanfarronada”.
“Ahora me he enterado del resto”, le dijo Valente a la televisora portuguesa TVI en una entrevista transmitida el domingo.
Wright, que vivía bajo el nombre de José Luís Jorge dos Santos, no tenía ocupación conocida, pero supuestamente en un momento poseía un restaurante de pollo a la barbacoa , vendió artículos en un puesto en una popular playa turística, trabajó como guardia en un el bar local, y, al igual que Melvin McNair, entrenó a jóvenes en el baloncesto estadounidense. Se casó con un traductor portugués-inglés que era 13 años más joven y, juntos, la pareja tuvo dos hijos. Sus vecinos sabían que su primer nombre era George, pero no conocían su historia, suponiendo que fuera africano, no americano.
Portugal rechazo su extradición, porque Wright tiene la nacionalidad portuguesa y por prescripción de la pena.
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